Son las instalaciones que actúan como nudos de la red de transporte, en los que confluyen varios circuitos eléctricos, y en ellas se ubican los elementos necesarios para su maniobra y protección.

  • Tecnología AIS

    Las subestaciones de aislamiento en aire (AIS) o convencionales, habitualmente instaladas a la intemperie, se componen de diferentes elementos: de medida, de maniobra en vacío y de maniobra y/o de corte en carga que permiten despejar los cortocircuitos o faltas.

    Puesto que estas subestaciones se conectan con redes de generación y/o distribución, en muchos casos se equipan con elementos de transformación de potencia y, del mismo modo, con elementos de control de tensiones como reactancias y/o condensadores.

    Estas instalaciones están sometidas a las inclemencias atmosféricas, por ello es necesario garantizar su protección frente a las mismas, así como la protección de las personas que transitan por ellas con redes de tierra superior e inferior que sean capaces de limitar las tensiones de paso y contacto, unas medidas que se aplican de acuerdo con la legislación vigente.

    Asimismo, dispone del espacio necesario para garantizar también el aislamiento de sus elementos.

    Los terrenos donde se ubican deben tener las mínimas pendientes y una plataforma explanada adecuada y dispondrán de los drenajes adecuados para impedir su inundación ante lluvias torrenciales o elevación de niveles freáticos.

    Para la gestión de estas instalaciones, es necesario equiparlas con casetas o edificios donde se ubican los elementos de protección, control y comunicaciones que las conectan con otras subestaciones o con el Centro de Control Eléctrico.

    También cuentan con la dotación de servicios auxiliares que alimentan cada uno de los equipos de las subestaciones y se diseñan partiendo de redes de media/baja tensión en corriente alterna que se transforma a corriente continua para garantizar el funcionamiento de las mismas y llevarlas a una posición segura en caso de incidencia.

    Como elemento de respaldo se equipan con grupos electrógenos que dan soporte a los sistemas esenciales en caso de pérdida de la corriente alterna de las redes.

    Para garantizar su seguridad, las subestaciones se encuentran valladas en su totalidad y disponen de sistemas de alumbrado y de alarma de incendios y de otro tipo de incidencias, que informan al centro de control.

  • Tecnología GIS

    Las subestaciones con tecnología GIS (Gas Insulated Subestation, “Subestación Aislada en Gas”) son instalaciones donde los componentes por donde circula la corriente están encapsulados en un gas presurizado, a diferencia de las subestaciones convencionales donde el elemento aislante es el aire a presión atmosférica.

    El gas es el medio de aislamiento y corte, y si hablamos del gas SF6 (hexafluoruro de azufre), muy usado en este tipo de instalaciones hasta la fecha, este tiene ventajas como aislante frente al aire, lo que posibilita una reducción de las distancias entre los elementos y, por tanto, de las dimensiones de la instalación.

    El hecho de ser una instalación encapsulada en una envolvente de aluminio evita el contacto directo de las partes activas, en tensión, con la atmósfera, reduciendo así el deterioro y la necesidad de mantenimiento, y aumentando la fiabilidad y la vida útil de las instalaciones.

    El diseño de las subestaciones GIS es modular, lo que permite realizar una especie de mecano para conseguir la configuración deseada. Además, se puede encapsular cada fase de forma independiente (monofásicas) o las tres juntas (trifásicas).

    La puesta a tierra de las subestaciones GIS se realiza cumpliendo con la normativa correspondiente y dando respuesta a las distintas funciones desde el punto de vista de seguridad de las personas y de la instalación.

    Este tipo de instalaciones se construyen normalmente en lugares donde las condiciones ambientales son severas y en aquellos donde la superficie de implantación es reducida.

    La subestación GIS puede ir en intemperie o en interior de edificio, pero en caso de ser en intemperie requiere de protecciones superficiales especiales para evitar corrosiones o problemas que eviten el deterioro acelerado de los materiales que la componen para poder completar el periodo de vida útil para el que se diseñan, por lo que se recomienda que se instalen dentro de edificio.

    Las subestaciones blindadas (GIS), al igual que las AIS, requieren de unos servicios auxiliares, un sistema de protecciones y control, para su óptimo funcionamiento, y de una red segura y fiable de comunicaciones para su adecuada conexión con el centro de operaciones remotas (Centro de Control Eléctrico).

    Asimismo, el edificio donde se alberga la instalación GIS y el resto de los servicios va equipado con los dispositivos de seguridad, alumbrado y otros servicios habituales para su adecuada gestión y explotación.