Son sistemas en baja tensión que no forman parte del equipamiento de potencia. La mayoría son críticos y están completamente redundados.

La alimentación en baja tensión utiliza dos sistemas de corriente continua con baterías para disponer de energía en el caso de fallo de las alimentaciones principales y como elemento de respaldo se equipan con grupos electrógenos.

  • Control

    Los sistemas de control implementan las funcionalidades de todos los equipos, desde el mando eléctrico para maniobra de los interruptores de potencia o el cambiador de tomas de un transformador, hasta la programación de los sistemas automáticos (PLC), que supervisan alarmas y estados de los demás equipos, incluidos los que envían esta información a los centros de control.

  • Protección

    Los sistemas de protección monitorizan constantemente la red de transporte para detectar situaciones anómalas y aislar rápidamente las zonas en fallo. Su misión principal es desconectar el mínimo número de elementos posible para garantizar la seguridad y estabilidad del sistema.

  • Comunicaciones

    Los sistemas de comunicaciones se consideran igual de críticos que los servicios que presta. Las protecciones de ambos extremos de una línea, los sistemas de control de una subestación, la monitorización en tiempo real para el mantenimiento de los equipos, o el envío de órdenes desde los operadores (ubicados en los centros de control) a la aparamenta de maniobra (interruptores o seccionadores de potencia), son ejemplos de los servicios esenciales que prestan.