En el paraje de Alcántara, al norte de Cáceres

Nace un nuevo pollo de alimoche en una torre de alta tensión en Extremadura

  • Se trata de la primera pareja de alimoches del mundo que anida y procrea con éxito en un apoyo eléctrico.
  • El primer pollo de esta pareja nació el año pasado en estas mismas fechas y en el mismo paraje, lo que consolida este tipo de infraestructuras como soporte para la nidificación y puesta de estas rapaces.
22/07/2021

Un nuevo pollo de alimoche ha nacido estos días en uno de los apoyos (torres eléctricas) de la línea de alta tensión que discurre por el paraje de Alcántara, al norte de Cáceres. El hecho sigue siendo un caso extraordinario, ya que no se conoce en el mundo occidental otro caso de alimoches que aniden y procreen en un anidamiento situado en un apoyo eléctrico.

El caso saltó a la actualidad el año pasado por estas fechas, cuando otro pollo de alimoche nació en las mismas circunstancias, registrándose como el primero del mundo. Ahora, la misma pareja de alimoches, según han apreciado los expertos, ha repetido el suceso natural, confirmando que este tipo de infraestructuras constituyen un espacio óptimo no solo para el anidamiento, sino para la procreación de esta singular rapaz, también conocida como buitre egipcio, y catalogada en peligro de extinción desde 2007.

El pollo, una hembra de unos treinta días, ha sido anillado por personal experto del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, en una labor en la que también han participado técnicos de Medio Ambiente de Red Eléctrica de España y de la Consejería para la Transición Ecológica y Sostenibilidad de la Junta de Extremadura. Además del anillo identificativo, se le ha colocado un receptor GPS que va a permitir el seguimiento del pollo una vez que eche a volar e inicie su etapa migratoria.

Para Fernando Crespo, jefe del Departamento de Medio Ambiente de Red Eléctrica de España, "nuestra prioridad siempre ha sido y continúa siendo compatibilizar el desarrollo de las instalaciones de la red de transporte -esenciales para garantizar el suministro eléctrico a la población- con la protección de la biodiversidad, reduciendo al máximo su potencial impacto. Un hecho como este nos hace especialmente felices porque es una demostración de la convivencia y adaptación de estas rapaces a las infraestructuras eléctricas", concluye.

Algo en lo que coinciden los expertos. Para Víctor García, funcionario del Ministerio de Transformación Ecológica que ha llevado a cabo el anillamiento y reconocimiento del pollo, “el hecho de que se haya repetido por segundo año consecutivo evidencia que no se trata de algo casual. Si la especie sigue así, puede ampliar su territorio, y las torres eléctricas, lejos de ser una amenaza, pueden convertirse en una oportunidad para el alimoche en esta zona”.

De hecho, la pareja de alimoches no ha utilizado el mismo nido que el año pasado, sino que ha construido uno nuevo, para lo que, además, ha elegido un apoyo diferente, lo que, según García “reafirma esta tendencia insólita en esta especie”. Los expertos creen se este comportamiento se debe a la adaptación de esta especie al cambio climático, que le obliga a buscar nuevos hábitats, encontrando en las torres de alta tensión un elemento clave para su desarrollo.

En la actualidad no se tienen noticias de la parada migratoria del pollo nacido en junio de 2020, al que también se anilló y se le colocó un dispositivo con un emisor GPS, aunque se sospecha que pueda estar en el sur del Sahara, punto en el que se perdió el contacto. “En todo caso, lo normal es que no regrese a su lugar de origen hasta transcurridos dos años. Si sigue con vida, en la próxima primavera lo veremos volar de nuevo en Extremadura”, ha explicado Víctor García.

Para la Consejería para la Transición Ecológica y Sostenibilidad, el marcaje de este pollo de alimoche forma par-te del seguimiento mediante GPS que la Junta de Extremadura está realizando de ejemplares de especies amenazadas, especialmente el alimoche, una especie que muestra un comportamiento migratorio muy peculiar, probablemente relacionado con el cambio climático. Extremadura es la única región de Europa donde permanece una población invernante, que crece cada año, superando los 150 individuos, aunque el pollo marcado en 2020 realizó su migración al centro de África, donde permanece desde agosto de 2020, junto a otro pollo nacido en Monfragüe.

En este caso, la importancia de este anidamiento radica en que una especie amenazada ha expandido su área de distribución utilizando como soporte para el nido una torre eléctrica, en un territorio donde no había su sustrato natural (cortados rocosos), esto está permitiendo que REE y la Junta de Extremadura estén desarrollando un  plan de expansión para el alimoche, utilizando las torres de líneas de alta tensión.