Red Eléctrica, la empresa de Redeia responsable del transporte y la operación del sistema eléctrico en España, colabora con el Gobierno de Navarra para la protección y conservación de la biodiversidad en la Ribera y, así, mejorar la integración de las infraestructuras en este entorno. 

Concretamente, Red Eléctrica impulsa la protección del Águila Real (Aquila Chrysaetos), una especie incluida en la Lista Roja de las Aves de España, con la categoría de “casi amenazada”, a través de un programa de marcaje y radio-seguimiento de ejemplares adultos.

Se trata de un proyecto con el que se ha obtenido una valiosa información del área de campeo y del uso del espacio realizado en algunos territorios de Águila Real en la Ribera de Navarra. Así, el radio-seguimiento ha demostrado que las Águilas reales utilizan las torres de transporte de electricidad con diversos fines: como oteaderos para cazar y vigilar el territorio; como refugio para descansar o pernoctar y como posaderos para consumir presas fuera del alcance de otros predadores. 
 

La preferencia por una torre específica depende de su ubicación, altura y el objetivo de las águilas, como vigilancia, caza o descanso. Las torres situadas en áreas de caza favorables o cerca de dormideros tranquilos son frecuentemente usadas. La altura de estas es crucial, prefiriendo las más altas, de 400 kV. En zonas con apoyos de diferentes alturas, como en la línea Castejón-Muruarte, las águilas optan por las más altas, duplicando las veces que se posan en ellas.

Esta información del uso del espacio por parte del Águila real en la Ribera de Navarra, corresponde concretamente a las zonas de Caparroso-Marcilla, Cruchaga-Caparroso y Cadreita. Actualmente, se mantiene activo el programa de radioseguimiento de tres ejemplares de Águila real reproductores adultos: "Luna", "Oskía" y "Keiles". 

Además, se está llevando a cabo un seguimiento de la reproducción de las parejas radio-seguidas, cotejando los parámetros reproductivos actuales con los conocidos para esta misma subpoblación hace décadas y determinando en los tres territorios estudiados la extensión de los movimientos y la distribución de los mismos, comparando los hábitos de las parejas reproductoras.

En concreto, a través de la comparación entre las distintas parejas estudiadas y su relación con el tipo del hábitat se espera obtener conclusiones extrapolables al resto de los territorios del Águila Real en Navarra, así como conocer la extensión relativa del área de campeo, la dispersión de las localizaciones respecto al área de nidificación o hábitat seleccionados.

El proyecto, que concluirá a finales de 2024, está permitiendo establecer criterios de selección y de seguimiento ambiental a la hora de implantar nuevas infraestructuras de energía para mejorar la gestión ambiental de la especie en Navarra.