En 2021 el alimoche hizo un nido por primera vez en un apoyo de las líneas eléctricas de transporte en Extremadura. La pareja logró criar y sacar adelante un pollo al que se logró marcar y se bautizó como ‘Ruanda’, por los vuelos que realizaba a África.

Un año después, tras ese primer pollo, en el apoyo de al lado al anterior, volvió a criar, pero las altas temperaturas impidieron que ningún ejemplar saliera adelante.

Hemos instalado una cámara en el primer apoyo donde crió la pareja, junto a una plataforma. Tras volver volando desde África, Ruanda se apoyó en el nido y se asomó a la cámara. Debe ser tímido, porque se marchó y de momento no ha vuelto.